El tratamiento de gases con procesos catalíticos es una técnica clave en la industria para el control de emisiones contaminantes en el ambiente. Los catalizadores son usados para acelerar las reacciones químicas que transforman los gases contaminantes en productos menos perjudiciales.
Los procesos catalíticos se basan en que, bajo condiciones específicas, ciertas sustancias químicas pueden acelerar las reacciones químicas sin consumarse en el proceso. Estos catalizadores funcionan optimizando la energía de activación requerida para que la reacción ocurra, permitiendo que las reacciones se produzcan a temperaturas más bajas y en condiciones más suaves.
La elección de que tecnología usar depende de muchos factores como: los contaminantes (NOx, COVs, SOx, CO, …), condiciones de operación (temperatura, presión, concentración de contaminantes, …), eficiencia y costos (CAPEX, OPEX, …).
Entre las tecnologías disponibles destacamos la reducción y la oxidación catalítica. Cada una de las tecnologías es óptima para tratar un tipo de contaminantes diferentes; en la oxidación catalítica un catalizador se utiliza para ganar oxígeno; en la reducción catalítica el catalizador se utiliza para la pérdida de oxígeno.
La reducción catalítica es una tecnología ampliamente utilizada en el tratamiento de gases para reducir las emisiones de óxidos de nitrógeno (NOx). Esta tecnología se basa en la utilización de un catalizador, generalmente formado por metales nobles como platino o paladio, para facilitar la conversión de NOx en nitrógeno (N2) y agua (H2O) a través de una reacción química controlada.
Para el proceso de reducción catalítica y el tratamiento de NOx, existen dos tecnologías utilizadas, la reducción catalítica selectiva (SCR) y la reducción catalítica no selectiva (SCNR).
El SNCR es una tecnología más simple y menos costosa que el SCR, pero generalmente es menos eficiente en la reducción de NOx. Requiere un mejor control de la temperatura (850 ºC – 1100 ºC) en la zona de inyección del agente reductor para optimizar su eficacia. A menudo, se utiliza en aplicaciones industriales donde no se requiere una reducción tan rigurosa de NOx como la que se logra con la tecnología SCR, o cuando los costos del sistema son una consideración importante.
En un reactor, los gases contaminantes se hacen pasar a través de un lecho de catalizador, donde se inicia la reacción química en presencia de oxígeno y el catalizador, que reduce la energía de activación necesaria para que la oxidación ocurra a temperaturas más bajas. Esto permite que las sustancias contaminantes se conviertan en productos más seguros a temperaturas y condiciones operativas controladas. Los catalizadores comunes en la oxidación catalítica incluyen platino, paladio y rodio, que aceleran la reacción química sin consumirse en el proceso, lo que los hace reutilizables y eficientes.
Los contaminantes gaseosos tratados más comunes con esta tecnología son los compuestos orgánicos volátiles (COV) y monóxido de carbono (CO), se transforman en productos menos dañinos, como dióxido de carbono (CO2) y agua (H2O), a través de un catalizador.
En resumen, existen multitud de procesos catalíticos para la reducción de contaminantes, donde el uso de uno o de otro depende de múltiples factores. Te animamos a contactar con nuestros técnicos especialistas para una atención personalizada.
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